It’s now or never.

Ver otra vez fallar a Felipe Rivero (dos veces al menos en una semana, cifras alarmantes para un cerrador) indica que con apenas nueve juegos restantes en la temporada regular, se reduce el margen de error para Navegantes del Magallanes. Si se quiere tener oportunidad de clasificar directo al round robin semifinal, se debe tener la consistencia en ganar seguido lograda brevemente en dos períodos, ambos desde que Yadier Molina funge como manager. Para lograr esos ocho triunfos que los incrustarían directo en puestos clasificatorios, Carlos Rodríguez, Eliecer Alfonzo y Tucupita Marcano, los bateadores más consistentes a lo largo de la campaña tendrían que rematar con ímpetu en esta recta final. Además se requiere la reacción vigorosa de los bates de Angel Reyes, Renato Núñez, Andretty Cordero y Yasiel Puig. También es muy pertinente que Sardiñas y Rougned Odor mantengan esa continuidad ofensiva, que bateen a terrenos de nadie con mejor regularidad, y que José Goméz recupere el oportunismo con el madero y mejore sus oficios a la hora del toque de sacrificio.

Más esencial todavía sería que los pitchers abridores se contagiasen de Ricardo Sánchez para eslabonar seguidillas de innings en blanco. Y sobre todo que Enderson Franco, Felipe Rivero y Amilcar Chirinos recuperen el comando y control que mostraron a inicios y mediados de temporada. También que los pitchers importados nuevos aporten su grano de arena. Y que Odubel Herrera sea ese pelotero motivador y consistente que Diego Castillo nunca fue en Magallanes. De nada servirá jugar para quinientos, ni de 5-4, tampoco de 6-3, apenas jugando para 7-2 se podría disputar el cuarto puesto. El propio Molina sabe que de nada le sirve terminar con marca personal positiva, si esta no alcanza para clasificar. Hora de rematar. De ver si de verdad se cuenta con las herramientas para ganar muchos juegos seguidos. De comprobar si de verdad You can do it all. De echar el resto.

Alfonso L. Tusa C. Diciembre 15, 2025.